En el primer libro de las santas escrituras, Génesis, habla que Dios ha criado el hombre y la mujer. La primera pareja que se conoce hasta los días actuales. Esa es una prueba cabal que nosotros no nacimos para vivir solos. Pero, Dios nos dio el libre arbitrio para que elijamos nuestros propios caminos y decisiones. Yo pienso que hoy día las situaciones de la vida dictan nuestra manera de vivir. Muchas veces nos gustaría hacer una familia con compañero e hijos, pero nos ocurre cambios de manera de pensar en la vida después de ver o salir de una situación desagradable. Frente a un gran número de divorcios, muchos temen contraer matrimonio y van a vivir solos a causa de la seguridad y de la privacidad de sus propias vidas. Prefieren pagar un alto precio a no tener riesgo de una gran frustración. Yo creo que vivir solo o acompañado siempre tiene sus ventajas y desventajas. Hablando de economía, de los quehaceres en un piso o en una casa y del compañerismo de alguien, vivir acompañado es una ventaja. Ahora sí tu compañero ya no es una buena compañía o ya dejó de ser una verdadera compañía, vivir solo puede ser en este momento una ventaja. Como ya había dicho, las situaciones de la vida dictan nuestra manera de vivir. Hoy día hay una propagación muy grande en los medios de comunicación y por muchas personas de que vivir acompañado es para quien le gusta ser controlado. No estoy de acuerdo con eso pensamiento. Pues, las parejas más felices son las que no hacen de su relación un prisión, y sí, un ambiente de confianza.
* Autor: Maury Santos
* Editora: Yolanda Oliva
* Twitter: @yolinena * El video y las fotos han sido sacadas de la web.